Sergio Linares - Serie "Todo mayo: Evio Di Marzo y su Adrenalina Caribe, antes y después"



Esta emotiva y amena entrevista con Sergio Linares fue realizada el 17 de diciembre de 2018, en Caracas, en la Editorial Contrapunto.

Sergio Linares es músico violinista. Perteneció al Kinteto Zalvaje, junto a Evio Di Marzo, Felipe Blanco, José Rafael "Mulato" González, Efraín León y Roldan Peña. En la entrevista, Sergio cuenta que supo de la música de Evio y Adrenalina Caribe desde muy pequeño y que quedó impactado. Luego de pasar por la música académica y formar parte de la Camerata, se encuentra con Efraín León y ambos terminan conociendo a Evio y formando parte del Kinteto. Para SergioEvio fue una escuela musical, y el Kinteto, un collage, que puso todo su acento en tarima y en el diálogo que sus integrantes y sus instrumentos podían generar... 


—Sergio gracias por la entrevista. ¿Cómo te vinculaste con Evio y entraste a formar parte del Kinteto Zalvaje?

—Muchísimas gracias por la invitación. Mi primera impresión de Evio fue cuando yo tenía como 7 u 8 años. Estábamos en una fiesta y mi hermano, que era muy melómano, puso un disco y sonó la canción “De dónde viene tu nombre”. Yo me quedé impactado y en ese momento ni siquiera pensaba en ser músico. A raíz de eso, le pregunté a mi hermano de quién era esa música, y me dijo: 'De un grupo que se llama Adrenalina Caribe'. Yo le pedí que me pusiera los discos de Adrenalina, y entonces escuché “Selva del tiempo”, y luego escuché todos los discos que tenía mi hermano y me quedé impregnado de esa música.

También en esa época había otras cosas, estaba Yordano, estaba Ilan Chester... Así que yo me fui alejando de toda la música infantil y me convertí como en un gato verde, porque escuchaba y me gustaba la música que hacía también Vytas Brenner

Entonces así fue que me vinculé inicialmente con Evio, en esa época, a través de su música.

Llega la adolescencia y entro en la Orquesta, primero con el contrabajo, después me cambié al violín. Llego al Pedagógico y me encuentro con Efraín León, que es mi hermano del alma, entonces él me ponía mucha música experimental porque yo era extremadamente académico y, de pronto, me vuelve a poner Adrenalina, y comenzamos a hacer la música de Evio, y sacábamos todo el disco, Efraín con la guitarra y yo con el violín.



Pasó el tiempo y yo estaba en la Camerata de Caracas, y un amigo mío, Iván Pineda –no lo voy a olvidar–, me dice que quiere invitarme a una reunión donde va a estar tocando un músico. ‘¡Llévate el violín!’, me dijo. Yo en ese momento tenía un concierto con la Camerata, eso fue entre los años 1995 y 1996. La reunión fue en el Centro Letonia, y cuando yo llego, me digo: ‘¡Pablo Manavello!’, porque se me pareció a Pablo (risas), y Evio estaba tocando en ese momento “El 7”. Cuando arranca con “Selva del tiempo” me quedé loco. ¡No puede ser, es Evio!, y saqué el violín y tocamos todas las canciones. Evio se quedó loco, ‘¡pero qué es esto!’, porque me sabía todas las canciones.

Al tiempo Evio me dijo que tenía la idea de montar un quinteto, y que tenía dos elementos, a Felipe Blanco en la percusión y a mí en el violín, me dijo: ‘Tú eres el tercer elemento! Le pregunté: ‘¿Qué te falta?’ y me dijo que necesitaba alguien que lo acompañara con otra guitarra. Yo le dije que tenía a la persona y de allí se terminó de conformar el Kinteto con Efraín en la guitarra y Mulato en el bajo. Cuando comenzamos a tocar, era una cosa maravillosa, porque era como si nos hubiésemos conocido de toda la vida, y allí arranca el Kinteto como tal.


—¿Cuáles son tus mayores satisfacciones con el Kinteto?

—Cada presentación del Kinteto era diferente. Nada de lo que sucedía con las piezas, cada vez que nos presentábamos, se repetía, siempre había un elemento nuevo. Sobre todo en “Bio Bio”, es decir cómo yo empezaba a conversar con Felipe en la percusión, cómo conversaba con Roldan, con Efraín, con Mulato y hasta con Evio… El violín es un instrumento melódico pero no había un solista de violín sino que éramos un quinteto. Era un collage, algo transversal.


—¿Qué puede decir Evio? ¿Qué es lo que más recuerdas de él? ¿Qué te dejó?

Evio para mí tiene varias partes, pero la global es lo extremo que era Evio. Yo decía que Evio estaba entre la luz y la oscuridad, Evio era extremo. Él podía pasar de un lado al otro sin problema. Yo me decía: ¡Qué extremo!, claro, estaba allí su genialidad musical. Evio para mí fue una escuela. Yo soy antes y después de Evio.

Yo con Efraín conocí muchas cosas pero Evio fue como la guinda musical de la torta. Con Evio definí lo que yo quería ser, que era ser acústico. Evio me enseñó eso con el Kinteto.

Tema "No es fácil amar a una mujer" / Evio Di Marzo y el Kinteto Zalvaje (*)

Evio me decía:

—Acuérdate de la economía. No estés tocando por tocar… Felipe va a ser ¡pa!, yo voy a hacer ¡cla! Y tú vas a hacer ¡ta!, el bajo hacen ¡tan!, y así…

Él construía toda su música con lo que tenía, y yo eso no lo había visto nunca en ningún músico hasta el momento.

Entonces Evio siempre me decía: 

Sergio, ¡recuerda la economía!, ¡no malgastes la música!, ¡escucha a los demás, escucha!...


Entonces se fue dando una magia musical entre los cinco. Inclusive llegaron otras personas a suplirnos y él volvía atrás. Un día me molesté con él por cosas que pasan como en las relaciones de pareja. Me acuerdo que a veces llegaba a la pizzería y estaba Felipe afuera. ‘¿Hoy vamos a tocar?’. ‘No’, me decía Felipe, ‘Evio está deprimido’. Yo agarraba una rabia (risas), porque yo era cuadrado, académico.
Con el Kinteto pasaba una cosa: se daba una magia increíble en la tarima. ¿Tú crees que nosotros alguna vez ensayamos? Nunca. Todos los temas se montaban en la tarima y llegó un momento en que los temas alcanzaron un nivel de compenetración muy alto. Pasaban músicos con un nivel muy alto, con mucho talento, y nada...".
Cuando yo hago arreglos en la música ahora yo lo pienso en formato de cinco. Imagínate la influencia tan grande que ha tenido Evio en mi vida. Yo trato de tocar unido a los demás instrumentos, Evio para mí, musicalmente, ha sido una escuela.
"Evio fue una escuela musical en cuanto a lo acústico, al sonido acústico. Él tenía en su cabeza cómo iba a sonar cada tema, cómo iba a sonar cada instrumento, cómo iban a sonar los coros, ‘quiero que el coro haga esto o haga lo otro’... Evio no hacía la música para figurar, y eso me impactó muchísimo. Un día se le ocurrió que íbamos a tocar con una tela en frente (risas), para que la gente no nos viera sino que escuchara la música...".
Con Evio conversábamos mucho. Me hablaba mucho de El Corán, yo lo escuchaba y me gustaba muchísimo. 

Tema "De dónde viene tu nombre"/ Evio Di Marzo y el Kinteto Zalvaje (**)

—¿Qué canciones de Evio te gustan más?

“De dónde viene tu nombre”, una vez que la tocamos, después de tocar, se fisuró el violín, y Evio decía que ese violín era mágico (risas).
"Esa canción encierra toda la pureza de Evio. Toda la luz que Evio podía emanar está en esa canción".
Y la otra canción es “Bio Bio”, que me parece una canción profética y que describe muchas de las cosas que están pasando y la frase crucial: “No quiero más tristeza, no quiero más miseria...”.


Tema "Bio Bio"

Del 4to LP "EVIO DI MARZO Y SU ADRENALINA CARIBE – BIO BIO" (1990)
Realizado y dirigido por Evio Di Marzo
Correalizado por: Rodolfo Reyes, Miguel Blanco y Hermes Carreño

Tema "Bio Bio"


Piano: William Cabrera

Bajo: Miguel Blanco
Guitarra eléctrica: Roberto Jirón
Saxos: Rodolfo Reyes
Coros: Carlos Puchi y Evio Di Marzo
Tumbadoras: Orlando Poleo
Timbal: Alfredo Villamizar
Batería: Eliazar Yánez
Arreglos de viento: Evio Di Marzo
  
(*) y (**) Videos producidos y subidos en Youtube por Roberto Barbosa

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